El ciego y la gótica.

Casa Sinclair | Miércoles por la tarde | Raven (Felicity).

Olivia se había ido a Francia a aprender de los inferi, sus padres fueron a una de esas juntas de campiros que algún día le tocarían, sus hermanos salieron a divertirse por ahí y a Evan le tocaba quedarse a cuidar la casa, o lo que es lo mismo, tirarse en su habitación a ver alguna película mientras comía sangre congelada en forma de paleta de hielo. Las tenían para calmar el hambre y la necesidad de vez en cuando, a pesar de que eran de sangre anmal, pero servían como aperitivo de vez en cuando y sí, estaba con el portátil abierto, pasando la selección de películas de Netflix. Que sea un vampiro y tenga como unos cien años de vida, no significa que no haya aprendido a usar aquellas cosas y que no pueda entretenerse, el problema es que tenía demasiado tiempo y se había visto casi todas las películas de la plataforma...

Cuando encontró la parodia de la película de Crepúsculo, sonrió pensando en Olivia y estaba a punto de reproducirla, cuando escuchó un golpeteo en su ventana. Frunció el ceño y agudizó el oído, ignorando el portátil. El golpeteo se repetía con cierta cadencia, era algo pequeño que rebotaba contra el vidrio. Se puso de pie y se acercó a la pesada cortina que lo prevenía del sol, para apenas asomarse lo suficiente para ver que alguien estaba lanzando piedritas a su ventana. Esperen, ¿Cómo? ¿Quién se atrevió a cruzar la verja del jardín de en frente? La reconoció entre todo el vestir de negro y el delineador, era Raven, más amiga de Olivia que de él, pero de algo se conocían. Se apresuró a buscar sus lentes de sol auqnue afuera apenas quedaban restos del atardecer y terminó por correr la mitad de la cortina para dejarse ver. Sus ojos estaban en Raven a pesar de que él actuaba como ciego, como siempre y parecería que solo se estaba asomando. Abrió también la ventana justo cuando una piedra se aproximó a estrellarse contra su pecho. Una lástima no haberla evitado.

-¿Quién está ahí? -se creería que fuera una mala broma de algún fastidioso en Halloween, pero no. Ah, tan bien que estaba dejando de pretender ser un ciego...

Casa Sinclair | Miércoles por la tarde | Evan

Algo raro está pasando. Vamos que si está pasando, como que se llama Raven que ahí se cuece algo extraño. Bueno, Raven no es su nombre pero como si lo fuera, ya se entiende lo que quiere decir. El caso es que, por mucho que Liv se empeñara en negarlo, Raven no es tonta y sabe que algo ocurre. ¿Qué es eso de marcharse a Francia así tan de repente y sin preguntarle si quiere ir con ella? Que ella siempre quiso ir a Francia, ahora siente envidia de Liv. El caso es que su amiga le contó nosequé historia de algún lío familiar que le obligaba a irse tan repentinamente a la tierra de las baguettes y los croissants. Pero, ¿desde cuando Olivia tenía familia en Francia? Toootal, que decidió investigar. Su primer plan fue ir a casa de su amiga y preguntar a sus padres, pero claro, hablar con los padres de tus amigos siempre impone por mucha confianza que haya. Así que pasó directamente al plan B, es decir, interrogar al mejor amigo de Olivia.

Así que por eso estaba allí, frente a la casa de los Sinclair tirando piedrecitas a una ventana y rezando para no haberse confundido de habitación (aunque si el que se asoma es Morgan tampoco pasa nada (///) así se alegra su vista de mortal). Y al fin se abre la ventana y se asoma el paliducho rostro de Evan (mira quién habla de palidez).

- PSSST, Evan. Aquí abajo- sacude los brazos intentando llamar su atención. ¿PERO POR QUÉ LO HACE, SI ESTÁ CIEGO? A veces se le olvida ;_;-. Soy Raven. Abre la puerta, tenemos que hablar- como ella no tiene tanta confianza con el chico como Liv, nunca ha estado ahí y no sabe que a Sinclair no le gusta que invadan su humilde morada.

Casa Sinclair | Miércoles por la tarde | Raven (Felicity).

En casa necesitan uno de esos perros enormes que imponen, así nadie se atrevería a cruzar la reja de la entrada ni aunque estuviera abierta, como seguramente sucedió ese día por algún descuido. O no, tal vez Raven simplemente entró sin más, era un pesona peculiar, así que al escucharla, baja la cabeza como si con eso pudiera verla. Bueno, sí que la ve.

-¿Raven? Ah... claro, está bien. Espera ahí -no sabe cómo logra mantener un tono tranquilo y hasta amale, en lugar de mostrarse crispado como se siente en el momento. Es que lo están invadiendo, la verdad es que los vampiros pueden llegar a ser muy territoriales, tanto como un licántropo, con quienes no tienen enemistad ni les da ponzoña una mordida de hombre lobo. Tonterías... Como sea, se apresura a terminar su pequeña paleta mientras se toma su tiempo para bajar y... ah, olvida el bastón, ¿dónde demonios lo dejó? Llevaba mucho sin usarlo y no sabe dónde lo puso por última vez... claro, al lado de la puerta. Se limpia el rastro de sangre de la boca, de paso toma un caramelo de la sala para disfrazar el olor de la sangre y abre la puerta para salir de inmediato.

-¿Qué pasó, Raven? -la llama desde el portal todavía, extendienod el bastón plegable, blanco y esperando como en dirección a donde debería estar la chica. Bueno, tampoco puede decir que le resulta molesta, solo no le ha gustado esa aparición. Lo bueno es que la puerta está bien cerrada a su espalda.

Casa Sinclair | Miércoles por la tarde | Evan

Vale, sí, lo confiesa. Saltó la reja. Pero que conste en acta que ella no acostumbra a hacer esas cosas, ella suele pedir permiso antes de entrar a ningún lado porque hacer eso le hace sentirse como los vampiros de Vampire Diaries, que no pueden invadir los hogares ajenos sin haber sido invitados previamente. Pero hoy es un día especial y quiere ir directa al grano. Cuando Evan anuncia que va a bajar, Raven va directa hacia la puerta de entrada a esperar.

- Te ha costado, ¿eh? ¿Qué estabas haciendo?, ¿esconder algún cadáver?- no lo dice en serio, obviamente, cualquiera que conozca un poco a la chica sabrá que acostumbra a hacer comentarios de ese tipo, que ella considera bromas. Ella iba a ir directa al interior de la casa en cuanto Evan abriese la puerta, pero en vez de invitarla a pasar se queda ahí parado en el portal lo cual la deja algo desconcertada. Antes de contestar hace una pausa de silencio a ver si así el chico le pregunta de una vez que si quiere pasar, pero como esto no ocurre no le queda otra que hablar-. Es sobre Liv y su viaje a Francia. La noté muy extraña cuando me dio la noticia y tampoco es que me contase gran cosa. Me dejó algo preocupada y se me ocurrió que tal vez tú, que tienes tan buena relación con ella, supieras algo más sobre el asunto. No quiero decir que desconfíe de ella pero... es raro- qué bien se explica.

Casa Sinclair | Miércoles por la tarde | Raven (Felicity).

Lejos de ponerse nervioso al escucharla, suelta una ligera risa de esas que son típicas en él. No, en serio, le hace gracia lo del cadáver y algunas otras bromas que suelta aquella chica amante de lo gótico, incluyendo cuando hace comentarios referentes a los vampiros de esa serie americana, The Vampire Diaries... tal vez no fue tan malo que algunos ancestros suyos pensaran que sería bueno que los humanos supieran algunas cosas, al final son muy graciosas la mayoría de ellas, como eso de que no tienen reflejo o no pueden entrar si no los han invitado. Eso de la invitación solo aplica con razas como los draconi, licántropos y sirenas, y eso que a las últimas apenas las ha visitado alguna vez.

- Lo intenté, pero al final no sé si lo escondí bien. Te pediría tu ayuda, pero no quiero envolverte en problemas legales, ya sabes... demasiado papeleo -ser un vampiro no lo exime de tener un poco de sentido del humor, aprovechándose de vez en cuando de su falsa ceguera. Sí, es divertido cuando la gente hace como que no lo ve a los ojos porque se siente incómoda, la verdad se divierte mucho con los humanos a veces.

Sintió la ligera preocupación de Raven desde que la vio al asomarse por la ventana, así que asiente con calma a las palabras de la chica. ¿Qué le dice ahora? Puede mentir, pero debe ser cuidadoso para que Raven se quede satisfecha con su respuesta, eso porque no quiere usar otras habilidades que se tiene guardadas-. Fue todo muy rápido, sí -demasiado incluso para él, lo cierto es que extrañaba a su amiga-. A ver, dime qué te dijo y así sabré a partir de dónde contarte, para no dar rodeos innecesarios ni repetir cosas que ya sabes -le pide, buscanod con una mano la pared para recargar la espalda contra ella. No quería meter la pata porque no sabía exactamente qué fue lo que haya dicho Olivia.

Casa Sinclair | Miércoles por la tarde | Evan

Que Evan le devuelva la gracia le hace sonreír. La mayor parte de las veces la gente se queda callada o la miran raro. Le gustaría contestar y continuar con ese interesante tema de conversación contándole todas las maneras que se le ocurren para deshacerse de un cadáver, y las cuales ha aprendido gracias a todos los libros, películas y series que se traga, pero  no puede olvidar los verdaderos motivos por los que está ahí. Así que, nada, tendrá que seguir con la charla sobre ocultar cadáveres otro día.

- Sólo me dijo que tenía que irse a visitar a su tía a Francia porque había enfermado y quería pasar un tiempo con ella. Pero nunca antes había mencionado tener familia en Francia, ¿a ti te había comentado algo? Es muy raro. No me gusta pensar mal de mi amiga pero me dejó con la sensación de que me ocultaba algo- aunque no fue únicamente ese momento, últimamente llevaba un tiempo notando a Liv como ausente. Felicity hasta estuvo pensando en regalarle  el último libro de Crepúsculo, el de la versión de Edward, porque aunque Olivia siempre lo negara Felicity sabía que era muy crepusculera :___-. Yo creo que le pasaba algo de antes pero nunca me dijo nada. ¿No se habrá metido en algún lío, verdad? ¿Tú no la has visto rara estos días? Bueno, no digo "ver" de ver. Ya me entiendes- ese incómodo momento en el que se te escapan ese tipo de expresiones delante de un ciego y no sabes cómo se lo puede tomar.

Casa Sinclair | Miércoles por la tarde | Raven (Felicity).

¿Una tía enferma? ¿De verdad esa había sido la gran excusa de Liv? Oh, tenía que haberle enseñado a mentir de forma más creíble, a ver cómo lo arregla todo y la localiza más tarde por teléfono.

-Es una tía abuela -comenzar por ahí-. Al parecer ella es muy importante para su madre o algo así, no sé. Se fue a vivir allá desde hace muchos años, pero no había mucha comunicación. Al menos Olivia nunca la conoció hasta ahora, ya sabes, esos familiares que parecen salir de la nada, pero siempre han estado ahí -se encoje de hombros-. El punto es que al parecer necesitaba la ayuda de alguien y bueno, ¿quién no quiere ir a Francia aunque sea con una anciana tía enferma? Ppero creo que le preocupaba no solo por su tía, sino por la escuela. Sus padres le dijeron que era una oportunidad grande y debería aprovecharla... no la escuchaba muy convencida, supongo que por el hecho de dejarlo todo aquí -y eso no es tan mentira. Ah, si sintiera remordimiento por inventarse esas historias, no podría dormir... ahora solo tenía que mantener el engaño y claro, ir a convencer a los padres de Olivia de que ella está en Francia con una tía abuela enferma... al menos sus habilidades psíquicas sirven de algo en esos momentos.

Sonríe un poco y mueve la mano para quitarle importancia al detalle de "¿No la has visto rara?" ¿Por qué fingir ser ciego? Ah, claro, porque Morgan puede andar por la vida sin hacer nada y sin el problema de fingir ceguera, simplemente se justifica de otra forma y fin. Igual que Callum... y Eileen. Tenía que ser el menor, es al que siempre le va peor.

-La extrañas, ¿no? -lo sabe porque lo siente venir de parte de ella y porque él también extraña a Olivia, con todo el tiempo que pasaron juntos en ese último año y medio, sin contar el tiempo anterior-. Tal vez por eso te parezca raro, pero podríamos sorprenderla un día por Skype, ¿no crees? Solo te encargas de que mi cara se vea bien en la cámara -así está cerca por si acaso. Apenas se había ido el sábado y sí, seguían hablando, pero no tanto como se esperaría, Olivia debía concentrarse en aprender de los inferi.

Casa Sinclair | Miércoles por la tarde | Evan

Se queda en silencio y escucha a versión de Evan taladrándolo con la mirada. Le gusta hacer eso con la gente, hace que los demás se sientan incómodos (sobretodo cuando lleva lentillas negras, blancas, o cualquiera de esas que se pone que dan tan mal royo). Pero claro, su interlocutor de ahora lleva gafas de sol y ni siquiera la ve así que eso no tiene sentido y al final la que se acaba incomodando es ella.

- Sí, eso puede encajar con lo que ella me dijo. Pero, ¿no te parece raro que haya ido ella sola? Si tan importante es para su madre, ¿no querría ella también verla? Quizás deberíamos ir a hablar con los padres de Olivia...- así, siendo dos no se sentirá tan intimidada. Que, además, por alguna extraña razón Felicity no suele caer muy bien a los padres de sus amigas, ni que temieran que fuera a incitarlas a cortarse las venas o algo por el estilo. Se queda más tranquila al ver que el chico no se ofende con su metedura de pata. Menos mal, porque seguramente no será la última. Uy, ¿cómo que la echa de menos? Ya ha bajado la guardia y se le ha notado por culpa de la preocupación. Ains, que ella tiene una reputación.

- No la extraño. Yo soy un alma solitaria, no estrecho lazos con simples mortales. Olivia es mi... aliada- sí, eso le suena menos cursi que amiga- y me interesa que esté bien- intenta mantener un tono de voz apagado y montóno-. Pero supongo que lo del Skype es aceptable, así le podemos preguntar a ella directamente. Sólo recuérdame que baje el brillo de la cámara para que no te veas sin cara como Slenderman- a ella al menos se le reconocerán las facciones por la cantidad de sombra de ojos que se echa y la hace parecer un panda, y por los labios negros. Es que Evan es hasta más blanco que ella, que ya es decir. En el fondo Felicity envidia su palidez extrema, ella tiene que maquillarse la cara para acentuar más su propia palidez, si tuviera la piel de Evan ni le haría falta maquillaje-. Bueno, eso si Olivia tiene tiempo para llamadas de skype, que desde que se fue no hemos podido hablar casi. ¿Qué es lo que hará con su tía abuela que la tenga tan ocupada? Ya ni siquiera me da fav en twitter- ¿qué puede ser tan importante para que alguien deje de entrar en twitter?

Casa Sinclair | Miércoles por la tarde | Raven (Felicity).

Todo es más fácil con Olivia al lado, por ejemplo, lidiar con las ideas conspiracionales de Raven. Vamos, es que sí que es una chica lista o por lo menos, no se queda con las cosas como el resto de la gente suele hacerlo, lo que le agrada y al mismo tiempo se lo pone difícil a Evan. Si supiera algo de la verdad... pero no. No le corresponde a él airear ningún secreto salvo a Olivia. En serio, se acostumbró tanto a verla que ahora se aburre casi de forma mortal, incluso cuando conoce a otra gente y hay alguno que otro vampiro en la ciudad con quien se habla y se lleva bien. Olivia sin duda es su mejor amiga y las cosas no son iguales ahora.

-¿Hablar con sus padres? Hm... tal vez es algo demasiado delicado -intenta persuadirla por las buenas aunque puede ver desde ya, que eso no es suficiente. Tendrá que recurrir al plan B, supone, pero se lo toma con calma y observa a la chica detrás de sus lentes oscuros. Tan innecesarios pero al mismo tiempo le ayudan tanto, puede ver a la gente y seguir cada uno de sus movimientos. Así que comienza a concentrarse mientras la escucha, y lleva su mano delicadamente al hombro de Raven. Es tan delgada, que fácilmente podría hacerse pasar más por un inferi que por una vampiro.

¿Qué es más importante que hablar con sus amigos? Ah, no se le ocurre mucho, tal vez convertirse en una quimera para mantener el equilibrio y slavar las ocho razas en un tiempo mucho menor del que realmente es necesario. Hm... no está muy seguro, ¿eh?

-Felicity -la llama por su verdadero nombre. Lo sabe desde hace mucho, Olivia se lo dijo, pero como no le pega él jamás la llamaba así, sin embargo era necesario para llamar su atención, con aquel tono tan vibrante y profundo, como un murmullo ronco. Ella voltea con el ceño fruncido y se encuentra con los ojos claros de Evan, sin los lentes de sol de por medio para poder establecer un contacto visual adecuado. Entonces él entra a la mente de la chica, a sus recuerdos más recientes sobre Olivia y mientras ella siente que el tiempo se detiene y es solo un segundo de sopor, Evan se toma su tiempo para cambiar detalles.

Nada de tía abuela enferma, nada de problema familiar, simplemente la excusa de que consiguió una beca de intercambio para ir a estudiar biología un año a Francia. Más creíble, eso es lo que la mantiene ocupada como para no hablar con ninguno de los dos. Incluso cambia el recuerdo de las palabras que él mismo ha dicho y borra cualquier dato que no tenga que ver con la excusa de la escuela, así como el sonido de su voz llamándola Felicity y el encuentro de sus ojos con los de ella.

-Oye, ¿qué tiene de malo Slenderman? -dice al acabar con aquello, ya sin su brazo sobre el de ella y con las gafas bien puestas, como si absolutamente nada hubiera pasado, incluso se ríe-. Te diré qué, vamos a tomar algo a donde quieras, al final no podré ver si me metes en unas catacumbas, pero yo invito -total, no tiene nada qué hacer y el asunto de Olivia se ha solucionado. Por ahora. Así que eso hacen, no sin antes Evan asegurarse de que Mack llegará a casa pronto para cuidarla ella.